Indisociables como son, poder y cultura tienen una relación muy delicada. El poder mismo tiene una cultura. ¿es a esa a la que se llama cultura política? Se supone que si. He aquí una opinión liberal al respecto: Cuando el poder habla de cultura
No es el mayor santo de mi devoción, el autor. Pero su nota merece ser citada. Su opinión, no lo sabe o prefiere ignorarlo activamente, es muestra de una cultura política. Y seguro no es la dominante en estos días.
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