Al igual que se habla de una división digital, que empieza marcando a las generaciones actuales y producirá discriminaciones en las generaciones futuras, según niveles de acceso y explotación de tecnologías digitales, hoy entra al debate la división genética.
Algunos científicos reunidos en Estocolmo para el congreso "Genetic Revolution and its Impact on Society" concordaron en los riesgos de una división creciente entre los impulsores y detractores del conocimiento genético y su uso. Presentaron las coincidencias de esta con otras divisiones sociales, económicas y políticas; hablaron de preocupación sobre los riesgos de esas visiones antagónicas, que según su criterio, conducirían a más pérdidas que ganancias para la humanidad.
Simpáticamente relacionaron a esa división con la división entre "países pobres" y "países ricos", aún cuando gran parte -la mayor parte- de la investigación genética se estructura sobre patrimonio genético levantado en los países que menos desarrollo económico del tipo occidental han vivido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario